Por Vìctor Alejandro Tapia H.
A veces la risa es el remedio a muchas de nuestras falencias, no sé por qué a las personas les cuesta tanto acompañar el saludo con una sonrisa, hoy claro está no vengo a hablarles de urbanidad ni nada parecido, les voy a hablar de la realidad tal como es y de seguro sonreirán pensando quizá en quién es este loco que viene a decirnos en qué pensar y cómo vivir. Nada, pues escasas son las veces que la vida nos da la posibilidad de ser como somos porque de verdad carecemos de una identidad propia y sin embargo Colombia dizque es el país donde la gente es feliz. Hoy vine a compartir con ustedes las letanías de un colombiano ejemplar, un ser magistral que sonrió hasta que la muerte le hizo una mueca y se lo llevó de bruces al más allá, hablo de Jaime Garzón el humorista que solo nos hizo llorar una vez cuando fue asesinado vilmente.
Para que su crimen no pertenezca a las planas de la impunidad comparto este video para que lo descarguen de http://www.megaupload.com/?d=B07XPOP7 es de una conferencia que brindó Jaime Garzón en la ciudad de Cali y en la que precisa sin ser Profeta el destino común de Colombia, y sin ser Historiador la érratica descendencia de la que no heredamos nada bueno.
